La Strada Palazzo di Città, una vez ruga fragigena, conecta la Piazza Mercantile con la célebre Basílica de San Nicolás, destino secular de peregrinaciones de fieles cristianos y ortodoxos.
De hecho, la calle es un tramo del antiguo camino europeo de peregrinación que conectaba Galicia con Jerusalem y que paraba también en Bari, etapa fundamental porque en el que lugar donde se conservan las relíquias de su patrón, San Nicolás. Sin embargo, su topónimo actual se refiere al hecho de que hasta 1863 la calle fue sede del ayuntamiento, uno de los diferentes palacios nobiliares aquí ubicados. Si se toma la calle desde la Piazza Mercantile (imaginemos ser uno de los peregrinos que van directos hacia la Basílica), el camino estára rodeado por una serie de puntos de interés que debemos mencionar: la Iglesia de Santa Pelagia, en el número cívico 63, hoy dedicada a Santa Ana y probablemente construida entre el siglo XI y XII pero con la fachada reformada en épocas posteriores. El interior está decorado con un crucifijo de madera, un altar de madera dorada, cuatro estatuas de Santos y diferentes pinturas.
- Palazzo D’Amelj, en el núm. 61, edificio del siglo XVIII que perteneció a una rica familia de fedautarios de Binetto, caracterizado por la presencia de un lienzo en la fachada que representa a la “Madonna del Lume ” y que en 1767, tras la disolución de la Órden de los Jesuítas, fue trasladado a la iglesia del Gesú donde ha sido recentemiente restaurado.
- Palazzo Tanzi , en el número 54, antigua vivienda de la familia Tanzi, procedentes del norte de Italia que llegaron a Bari por el ducado de Isabel de Aragón, embellecida en la fachada renacentista, según un diseño muy característico de las construcciones del siglo XVI, con una portada con las iniciales de hierro de la familia y un dintel decorado por un epígrafe latín (Ingredere has aedes quisquis amicus eris) que indicaba la hospitalidad de la familia y por los medallones de Japige y Barione.
- Palazzo Zizzi, en el número 29, regalo de Bona Sforza a Onorato Zizzi, médico de la corte que despúes cayó en desgracia, de estilo medieval, pero con una portada renacentista adornada con un epígrafe latín (Post tenebram spero lucem) y bajorrelieves de los legendarios fundadores de Bari, Japige y Barione;
La calle termina con una sucesión de dos arcos donde está colocada una placa de 1762 en la que se recuerda la ampliación de la vía y el arco realizado bajo orden del Prior de San Nicolás y un bajorrelieve pólicromo donde está representado San Nicolás , uno de los muchos edículos votivos presentes en la ciudad vieja que parece dar la bienvenida a los fieles que acaban de llegar a la Basílica.